En el rol de conducto o como usuario un conductor accesible marca la diferencia, tiene otra óptica frente al volante, actitud, servicio y vocación. Nunca con afán, cero imprudencias, para o detiene la marcha de su vehículo si él o el pasajero lo necesita, bien sea por la ergonomía del viaje, reacomodación de él o del pasajero, en caso de mareo y de requerir usar un sanitario, usa el volumen de la música con moderación o en caso de usuarios con necesidades especiales no usa la radio, un conductor accesible está atento a las necesidades de su pasajero o acompañante.
|